Sí, es verdad, me gusta la novela histórica, porque si está bien construida, aprendes historia sin saberlo (como me ocurrió con IVANHOE de Walter Scott y la MAGNA CARTA). Y también las historias de caballería, me considero fanático de Juego de tronos, Geralt de Rivia o Las monarquías de Dios, aunque están pertenezcan más a la fantasía. Pero si quitamos los dragones o los duendes tampoco pasa nada.
Reconozco que mi capital no alcanza para impresiones de esa época, si es que se vendiese alguno, pero siempre podemos acceder a ejemplares que embellezcan una colección, como es el caso de mi adquisición: La historia de Pierres y Magalona (Talleres Horta, Barcelona, 1946, pintados a mano a todo color, y firmados por Joan D'Ivori, en papel hilo).
Podría parecer un pinta y colorea, y casi, pero no por un niño. Joan Vila i Pujol, llamado Joan D'Ivori o simplemente D'Ivori (por la blancura y pureza de su piel, Ivory significa en inglés marfil), fue un personaje sorprendente en el dibujo la pintura. Compaginó la escuela de arte con el taller de vidriería de su padre.
Sin más, adjunto unas cuantas imágenes del ejemplar, para que veáis lo bonito que es (al menos para mí).
¡Saludos!